Saturday, February 04, 2012


Una parte de la historia de los militares, en todo el mundo, en todos los tiempos, es una historia de infamia.

Infamia significa deshonra, descrédito, maldad, vileza en cualquier línea.

Y duélale a quien le duela, una parte de la historia de los militares en todo el mundo, en todos los tiempos, es una historia de infamia.

Infamia repetida una y mil veces en guerras, asesinatos, violaciones e infinidad de ejemplos de perversión y degradación. 

Infamia demostrada decenas de veces, con la indignidad de convertirse en “gorilas” o de servir de soportes y cómplices de decenas de “gorilas” que han esclavizado pueblos enteros en todo el  mundo, para vergüenza de la civilización.

En la Venezuela posterior a la independencia, los militares instauraron regímenes totalitarios y corruptos o protegieron y sostuvieron a dictadores corrompidos que ultrajaron la dignidad nacional, para llenar de oprobio la historia nacional.  

Esta es la verdad. Lo demás es mitología.

Al pan, pan y al vino, vino.

Pedro J. Avila

4 de febrero de 2012


Una parte de la historia        de los militares,                   en todo el mundo,                                                   en todos los tiempos,                                               es una historia de infamia.

Infamia significa deshonra, descrédito, maldad, vileza en cualquier línea.

Y duélale a quien le duela, una parte de la historia de los militares en todo el mundo, en todos los tiempos, es una historia de infamia.

Infamia repetida una y mil veces en guerras, asesinatos, violaciones e infinidad de ejemplos de perversión y degradación. 

Infamia demostrada decenas de veces, con la indignidad de convertirse en “gorilas” o de servir de soportes y cómplices de decenas de “gorilas” que han esclavizado pueblos enteros en todo el  mundo, para vergüenza de la civilización.

En la Venezuela posterior a la independencia, los militares instauraron regímenes totalitarios y corruptos o protegieron y sostuvieron a dictadores corrompidos que ultrajaron la dignidad nacional, para llenar de oprobio la historia nacional.  

Esta es la verdad. Lo demás es mitología.

Al pan, pan y al vino, vino.

Pedro J. Avila

4 de febrero de 2012
  



No comments: